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El verano está a la vuelta de la esquina y desde laCorsetera, nos gustaría compartir con vosotras todos los tips y secretos para que tu bikini o bañador favorito te acompañe durante muchas temporadas. Es muy frustrante tener que renovar tu ropa de baño cada verano debido al deterioro de la misma. 

Los bañadores y bikinis son prendas muy delicadas que requieren ciertos cuidados, por lo que toma nota de los siguientes consejos para que tu ropa de baño se mantenga intacta a través de los veranos.

1. Lava el bikini en agua fría

Una de las prácticas más eficientes para darle larga vida al bikini es la de lavarlo en agua fría. Nunca utilices agua caliente para enjuagar tu bikini, pues este está compuesto en gran parte por una fibra sintética llamada lycra. Este material es el que aporta la elasticidad a las prendas. Es importante no aplicar calor al bikini o bañador, pues estas gomas se dilatarán y el conjunto perderá tanto forma como elasticidad.

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2. Seca tu traje de baño a la sombra

Si no quieres que la tela se desgaste por el sol, tiende tus bikinis siempre a la sombra y del revés. De esta manera evitarás pérdidas de color o desgastes prematuros. 

3. Lava el bikini con gel neutro

Has leído bien, gel. El bikini es como una segunda piel. Por tanto, has de tratarlo como tal en todos los aspectos. La sal, la arena y el cloro son los peores aliados de tus prendas de baño. Lo más recomendable es lavar el bikini o bañador a mano y con una pizca de gel de ducha, pues es el que menos irritará este tipo de telas. Bajo ningún concepto se ha de utilizar suavizante, pues es el producto que más quema la lycra. Además, debes evitar a toda costa dejarlo a remojo, puesto que las propiedades de los tejidos pueden deteriorarse, e incluso puede perderse el color original.

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4. Vinagre blanco de manzana o sal gorda para los bikinis o bañadores

Precisamente para el anterior inconveniente, tenemos la solución perfecta. Si te estás preguntando qué remedios naturales son los mejores para el mantenimiento de las prendas de baño, ve directa al súper más cercano a por vinagre de manzana y sal gorda. Así es, las propiedades de estos elementos son aptas para el cuidado del bikini. Actúan de capa protectora, revitalizando así los colores y evitando su desgaste.

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5. Evita dejarte puesto el bikini mojado

En ocasiones, acudimos eventos donde la piscina es la protagonsita principal de la jornada. En estos casos, hemos de evitar dejarnos el mismo traje de baño puesto todo el día. Es conveniente cambiarnos al salir del agua y ponernos una prenda seca, puesto que la humedad atrae hongos y bacterias que pueden provocarnos infecciones o problemas de salud íntima.

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6. Cuidado con las cremas solares o bronceadores

Los productos como bronceadores o cremas solares, manchan muchísimo las prendas. Por ello, han de aplicarse cuidadosamente, a poder ser unos minutos antes de ponerse el traje de baño. Si has de reaplicarlo, que sea de manera en que el producto no toque la prenda. De ser así, podría crear en esta una mancha irreversible que echaría a perder nuestro bikini favorito.

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7. No guardes el bikini en plástico

Al guardar el bikini en plástico, este se recalienta y comienza a perder sus propiedades originales como la elasticidad. Además de ello, esta humedad puede traer, como se ha mencionado anteriormente, hongos y bacterias perjudiciales para nuestra salud. Por ello, lo ideal sería guardar el bikini entre prendas de algodón, evitando a toda costa bolsas de plástico. 

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Siguiendo todos estos consejos proporcionados por Piedad Zamora Maroto, fundadora de laCorsetera y experta en su profesión durante más de 50 años, tus bikinis te acompañarán en cada una de las temporadas de sol y calor, haciéndote sentir como una verdadera sirena.